27.1.09

Contraataque del monstruo

Frente a cualquier crítica que yo recibo, el monstruo reacciona con sus garras de inseguridad y minusvalía. Me zamarrea y me deja temblorosa y llorona. Me dice que todas las críticas son negativas, malintencionadas y que no confíe en nadie. Lo malo es que frente a esos ataques yo agacho la cabeza y me someto a que el monstruo tome el poder.
En esos momentos vuelvo a sentir odio hacia mi misma y me dan deseos de matarme. Mientras eso sucede, el monstruo se soba las manos, se ríe malicioso y cualquier posibilidad de confraternizar se vuelve nula.
En esos instantes no quiero mirar al monstruo, no quiero hablar con el ni menos aun ser su amiga; quisiera escapar de él y eso no es posible porque él está dentro de mí y hacia donde yo vaya, él tambien estará.
Monstruo aprovechador, su mayor oportunidad de ataque asesino se produce cada vez que me indispongo, como si el monstruo tuviera un pacto con mis hormonas para generar melancolía y fragilidad extrema.

23.1.09

Monster

Otra de sus facetas es la capacidad de hacerse el simpático, el buena persona, que no quiere caerle mal a nadie... este monstruo disfraza sus temores con pseudo respeto, pseudo responsabilidad, cuando la verdad es que muchas veces no le interesa realmente lo que está sucediendo en el exterior. Luego se divierte culpándose, enrabiándose conmigo, pues a ningún monstruo le gustan los disfraces ni los ocultamientos, estos son contra su voluntad.
Últimamente el monstruo y yo hemos compartido algunas caminatas, nos hemos mirado a los ojos con cierta timidez, pero esta va cediendo poco a poco: ya no se muestra tan reacio a parlamentar conmigo y en premio le he regalado una pizca de racionalidad, algo que él desconocía por completo...
Al parecer los temores que conforman a mi monstruo no han desaparecido, pero sí han disminuído por lo menos una talla, razón por la cual estamos acercándonos a una tregua, a una sensacion de mayor tranquilidad y de aceptación mutua.
Ayer, por ejemplo, tuve una visita importante respecto a los sentimientos, y mi monstruito no se manifestó en ningún momento, no interfirió, permitiéndome estar en paz conmigo misma durante toda la tarde. Antes, mi monstruo me hubiera llenado de inseguridades, de temor, de dolor, de afán de querer recuperar un pasado que no es más que eso: pasado.
Este monstruo se está portando cada día mejor, es como un yogurth americano... en el fondo, es dulce.

17.1.09

tres

Mi pequeño alien se alimenta en la soledad. Cuando sucede esto, él parece crecer mucho más de lo imaginable. Me dice cosas, murmura que soy fea, que soy tonta, que nadie me va a querer nunca Es un monstruo pedante puesto que se cree muy sabio y dueño de la verdad absoluta. En el fondo, es un monstruo muy infantil, que se tapa las orejas con sus deditos y se pone a cantar tristes canciones de cuna. Podríamos simpatizar por el lado de las canciones. Yo le podría ayudar a cambiarles la letra... por letras mas graciosas. Creo que debo bromear más con él, no ser tan seria y estricta con sus niñerías...

15.1.09

Más información sobre mi monstruo...

Mi monstruo es multifacético, también esta compuesto por una sensibilidad que se exacerba con facilidad, anteponiendo las sensaciones y los sentimientos antes que la razón.
Mi monstruo se hace el sordo. Mil veces le digo "ándate y déjame sola" pero él me ignora y sigue ahí, en su lugar de siempre. No pretende irse, él tiene derecho a morar en mí porque además es un monstruo que me otorga vida, o formas de reaccionar frente a la misma.
Me cuesta aceptar a mi monstruo, siempre trato de esconderlo o de hacerlo cambiar, pero como es lógico, no lo consigo, él es muy hábil y le gusta salirse con la suya
Mi monstruo es terco, mandón y un poco maniático, le guusta exigir perfección en todo lo que hago.
Mi monstruo me cansa, y aún no sé cómo hacer para quererlo y hacerlo ronronear.